Bienvenida · Welcoming

lunes, 13 de abril de 2020

Un polímata y su entrenamiento



Polímata delgriego πολυμαθής ('polimathós'), persona con grandes conocimientos en diversas materias científicas o humanísticas.

Quien leyera mi post anterior, se preguntará por qué no hilo con la idea del entrenamiento creativo.
Por qué empiezo con esta definición.
Y, sin embargo, rápidamente se dará cuenta de que es, precisamente, lo que intento.

El próximo miércoles 15, celebramos el nacimiento del más afamado polímata de la historia de la humanidad: Leonardo da Vinci #LeonardodaVinci.

Y por qué no decirlo, quizás sea uno de los personajes de referencia, mitos o ídolos de muchas personas (entre las que me incluyo), que hemos desarrollado conocimientos, como diría Tomás Motos, poliédricos.


A nadie ya se le escapa el resultado de la ecuación. Leonardo. Polímata. Creatividad. Entrenamiento.


Desde que sumé a mis múltiples ocupaciones e intereses el de la Creatividad, he defendido su ‘entrenabilidad’, si es que existe un palabro parecido.
Y cada vez que me planteo y planteo cómo entrenarla, acabo recordando unas palabras que escribí en la última página de mi primer libro Drama que, dicho sea de paso, volvería a suscribir tal y como está escrito, 25 años después:
¡LO IMPORTANTE ES HACER!

Una persona que quiera entrenar su creatividad, lo único que tiene que hacer es intentar probar con muchas cosas o, al menos, con acciones, ideas, asociaciones, formas de hacer, ver o pensar a las que su cerebro no esté acostumbrado.


Tiene que obligar a su cerebro a pensar de otra forma. Perspectivas. Asociaciones. Cambio de hábitos. Cambios de recorridos. Cambios de rutina. Cambios de experiencias.


Entrenar la creatividad no es esperar a que venga la musa o la inspiración, aunque ayuda.
No es ponerse en postura de meditación y poner la mente en blanco, aunque ayuda.
No es hacer ejercicios ‘creativos’ de los que vienen en manuales de trabajo mental, aunque ayuda.
No es ponerse a planchar o a conducir o a realizar cualquier acción que podamos hacer de forma automática para liberar las neuronas para otro pensamiento, aunque ayuda

Para entrenar, lo único que hay que hacer es … HACER… y ser consciente de que se está haciendo.


Es atravesar la curva de la competencia del saber que no se sabe S.N. al saber que se sabe S.S., siendo conscientes de cada mejora, de cada avance en nuestras capacidades.

Y no es hacer una cosa concreta u otra.
Es HACER, con mayúsculas, tal y como aparece en el libro.

De ahí que haya conectado el concepto del entrenamiento creativo con el hecho de ser polímata y con la figura de Leonardo.


Leonardo fue sabio en muchas artes humanas y científicas. Pintor, escultor, matemático, astrónomo, óptico, mecánico, lingüista… Y cada nueva área en el que se sumergía, veía facilitado su progreso por lo que ya tenía avanzado en el resto de las áreas. Parecieran o no adyacentes.
Y no diré más cosas de él, pues otros dirán y sabrán más que yo.


Cuántas veces habréis solucionado un problema aplicando soluciones de ámbitos que no tienen nada que ver.



Un profesor de teatro me dijo hace ya años, que un actor debía aprender a hacer cualquier cosa. Desde barrer a tocar el piano. Porque nunca sabía qué habilidades iba a necesitar para su próximo papel.


Pues una mente creativa, aplicada a cualquier habilidad, arte, ámbito educativo, social o empresarial, lo que debe hacer es aprender y hacer muchas cosas.

Cuantas más cosas, mejor, porque tendrá más posibilidades de combinarlas, asociarlas, correlacionarlas y conseguir avanzar en nuevos conocimientos a través de su mente creativa.


Y habrá quien diga… Pero cómo exactamente.

Pues desde cocinar cosas nuevas con combinaciones nuevas de alimentos y condimentos, hasta limpiar de forma distinta, pasando por aprender letras de canciones y poemas, o leer, simplemente leer, buscar palabras en el diccionario, buscar palabras en otros idiomas, contemplar fotografías, cuadros, imágenes en movimiento, o la naturaleza, urbana o rústica que tengas a tu alcance. O acabar haciendo un ramo de flores con gominolas de múltiples colores. Y escuchar. Escuchar activamente mucho, para acumular opciones con las que crear después. 


Si realmente queréis que detalle ejercicios, decídmelo y lo haré, aunque en algún post anterior ya proponía algunos.

Pero haced. Simplemente haced!!!


Y hoy, para terminar, aprovechando que es el Día internacional del beso, besad!!!

Y sed creativos besando, a quién, cómo e incluso por qué!!!


¡Gracias por seguir leyendo y, por supuesto, no solo se admiten, sino que se agradecen comentarios!

Yo estoy aquí porque vosotros estáis aquí..., y viceversa.  Un enorme beso a todos!!!!

#fbercebal

#ñaqueeditora

#creatividad

#teatrodecreacion

#devisingtheatre



No hay comentarios:

Publicar un comentario